domingo, 29 de junio de 2008

LA ALEGRIA




DEFENDER LA ALEGRIA
Defender la alegría como una trinchera
Defenderla del caos y de las pesadillas
De la ajada miseria y de los miserables
De las ausencias breves y las definitivas

Defender la alegría como atributo
Defenderla del pasmo y de las anestesias
De los pocos neutrales y de los muchos neutrones
De los graves diagnósticos y de las escopetas

Defender la alegría como un estandarte
Defenderla del rayo y la melancolía
de los males endémicos y de los académicos
del rufián caballero y del oportunista

Defender la alegría como una certidumbre
Defenderla a pesar de Dios y de la muerte
De los parcos suicidas y de los homicidas
Y del dolor de estar absurdamente alegres.

Defender la alegría como algo inevitable
Defenderla del mar y las lágrimas tibias
De las buenas costumbres y de los apellidos
del azar y también,… también de la alegría.
- Mario Benedetti –

Quise compartir contigo este verso en defensa a la alegría porque vivimos olvidándonos que ella espera por nosotros. Ella yace EN ti, en mí es fuente de salud y belleza, y nuestra alma resplandece ante su presencia. Nos “hace diferentes”. Nos invita constantemente a orquestar la vida con ella. Los beneficios de la alegría, como el humor son muchos, de partida nos da gozo, placer, vitalidad. Nuestra única tarea es confiar en el proceso y disfrutar el camino. El regalo que nos da la alegría es gozo, libertad y liberación. Su relación ante los problemas es alivianarnos…siendo lo lúdico una alternativa de camino a la solución.
Las emociones adversas como la rabia, frustración, el rencor, etc… nos debilitan y nos restan fuerzas, además de originarnos enfermedades, que no solo nos afectan directamente, sino que arrastramos a otros con nosotros a lo mismo…
Acoge, abre tus brazos y tu corazón a LA ALEGRIA y defiéndela!!